Consentimiento. Una relación sana implica sexo consensuado. Tu pareja no te obligará ni presionará para que hagas algo que no quieras hacer.
El consentimiento se puede dar y retirar en cualquier momento. Dar su consentimiento una vez no significa que dará su consentimiento en el futuro.
Curiosidad. Ambos son flexibles y ambos están interesados en aprender más el uno del otro.
alegría.
Una relación sana es alegre y ayuda a reducir el estrés.
Trabajo en grupo. Tanto usted como su pareja trabajan juntos para apoyarse y ayudarse mutuamente.
Respeto. Tu pareja respetará tus elecciones y decisiones y te apoyará en todo lo que quieras hacer.
